Las medidas, a menos de un mes de que comience el invierno y con la llegada de las primeras bajas temperaturas a la zona metropolitana, empezaron a ser aplicadas por Metrogas, Naturgy, Camuzzi y Litoral Gas.
Las principales distribuidoras de la Argentina comenzaron a interrumpir el abastecimiento de gas a clientes industriales y estaciones de servicio que contratan el fluido bajo la modalidad «interrumpible», indicaron hoy fuentes del sector energético.
Las medidas, a menos de un mes de que comience el invierno y con la llegada de las primeras bajas temperaturas a la zona metropolitana, empezaron a ser aplicadas por Metrogas, Naturgy, Camuzzi y Litoral Gas, según pudo confirmar la agencia NA con fuentes del sector.
Es la primera vez en tres años que es necesario cortar el suministro de GNC
«Desde hoy se torna necesario restringir tanto las Industrias como las GNC hasta donde indica el contrato en firme y cortar todos los servicios Interrumpibles», señalaron fuentes de las compañías.
El contrato en firme es aquel por el cual el cliente se asegura un volumen mínimo volumen ininterrumpible, que se está respetando.
Explicaron que el motivo es la «baja inyección de gas en el sistema por inconvenientes con el fluido proveniente de Bolivia y el Barco de Escobar».
En la región concesionada a Camuzzi Gas Pampeana fue necesario cortar el suministro a unas 130 estaciones de GNC por falta de gas en el sistema.
A las industrias con transporte en firme se les indicó cortar todo el gas que no esté contratado en esa condición.
Estaciones de servicio de las provincias de Buenos Aires y La Pampa sufrieron interrupciones en la provisión de GNC.
Las distribuidoras deben priorizar el abastecimiento de hogares, hospitales y otros organismos esenciales, como las escuelas.
Los cortes de contratos interrumpibles responden a una caída en la oferta de producción gasífera que se fue profundizando desde el inicio del conflicto de trabajadores de salud en Neuquén, que bloquearon plantas de extracción de esa provincia patagónica.
A esto se suma una medida de fuerza de la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval, en reclamo de que sus afiliados reciban vacunas contra el coronavirus, lo cual perjudica la operación del buque regasificador de Escobar.
Ese navío debía amarrar en el puerto de Bahía Blanca para inyectar gas natural a la red con vistas al invierno.
Según fuentes del sector energético, debía inyectar 17 millones de metros cúbicos en Escobar y sólo pudo regasificar 9 millones.
Para agravar el problema, otro buque que debía ingresar este fin de semana se demoró por las condiciones climáticas adversas.
La merma en el volumen de gas ya había impactado la semana pasada a las provincias de Santiago del Estero, Tucumán, Salta y Jujuy, y a zonas de Córdoba, Santa Fe y Cuyo, y ahora empezará a sentirse en Buenos Aires.
Este miércoles debería ingresar otro barco regasificador a Bahía Blanca.
Pero existen dudas de que eso se pueda lograr, porque el gremio portuario tiene prevista una nueva medida de fuerza.
Fuente: José Calero – Noticias Argentinas